Tener un baño pequeño puede hacernos más difícil sacarle partido en el ámbito de la decoración. Actualmente, esta estancia ha dejado de ser un espacio meramente funcional para convertirse en un lugar de relajación en el que podemos vivir experiencias sensoriales.
Esto supone que el baño debe estar diseñado con la misma dignidad que el resto de las habitaciones de la casa. Es el momento de convertirlo en un lugar más emocional.
Muebles suspendidos para dar más espacio
Decorar nuestro baño utilizando muebles suspendidos es una de las mejores técnicas para hacer más grande este espacio, aligerar la vista y dejar pasar más luz. Esto, además, nos facilitará la limpieza, ya que no encontraremos patas de muebles o rincones que nos obstaculicen la higiene.
Luz natural para agrandar el baño
La luz natural es fundamental, independientemente del tamaño de nuestro baño. Pero en el caso de las estancias pequeñas, mejora la percepción espacial que tenemos de esta. En caso de no poder contar con este tipo de iluminación, debemos optar por leds o bombillas cálidas y por espejos con luces de 360º que eviten las zonas oscuras en nuestro rostro cuando nos miremos en él.
También es muy importante contar con una luz para cada momento. No será lo mismo utilizar una iluminación más intensa para los momentos en que nos estemos arreglando tras la ducha que contar con una luz más tenue para los momentos más íntimos o relajantes.
Adiós a los azulejos y a los colores clásicos
A la hora de decorar un baño pequeño para darle más vida, es fundamental convertir el color en el protagonista. Utilizar tonos más fuertes y brillantes, especialmente en los azulejos y en las paredes, le dará un toque de personalidad.
Por otro lado, no tenemos por qué usar obligatoriamente los clásicos azulejos para revestir las paredes del baño. Podemos optar por murales prediseñados, microcemento o, incluso, papel pintado resistente al agua. De esta forma podremos crear diseños muy vivos y diferentes.
Cuida del planeta con la grifería adecuada
Si hemos optado por utilizar un color más fuerte en las paredes del baño, la grifería y la cerámica deben tener tonos más neutros, como blancos, grises claros, plateados o, incluso, dorados. Además, en este caso, será muy recomendable instalar grifos que nos permitan ahorrar agua. De esta forma gastaremos menos en la factura y cuidaremos del medioambiente.
En cuanto a la ducha, podemos convertirla en uno de los lugares más relajantes utilizando grifería con cascada integrada, nebulizadores, chorros especiales… ¡Y hasta luces LED!
¿Las plantas puedes ayudar a agrandar el espacio?
Las plantas en un baño no solo sirven para decorar o depurar el aire de la estancia. También pueden ayudar a relajarnos y, sobre todo, a dar profundidad a la estancia, siempre y cuando sean plantas que no nos quiten mucho espacio, como es el caso de las colgantes. Entra estas últimas encontramos el aloe vera, los helechos o las orquídeas.